UN APORTE DE ALVARO HIDALGO COLECCIONISTA DE MUSICA LLANERA RESIDENTE EN CRAVO NORTE CON MAS DE 20.000 TRABAJOS DISCOGRAFICOS EN SU COLECCION
Don Dámaso Figueredo, importante exponente de la canta llanera
del tipo "veguero". Sus canciones se caracterizaron por ese toque
criollo auténtico, donde las letras se entrelazaban buscando la picardía,
malicia, “chispa” y humor del llanero. Abundan en la letra de sus canciones los
refranes criollos, en ellas nos contaba historias que giraban en
gran medida en temas como la infidelidad, el amor en parejas de distintas
edades, embarazos escondidos, pero también de las realidades sociales. Los
títulos de sus canciones reflejan su estilo: "Cuando el Pobre Lava
Llueve", "La Novia Fajada", "Ni en Compadrazgo ni en
Primo", "La Hija Catira" "Mi Mujer se fué con Otro",
"Me la quitó un Bodeguero", "Ando Buscando una
VIuda""Lo que yo le pida, déme", "Las Viejas tienen su
Historia" y por allí muchos nombres similares, pues este artista grabó
muchos discos con grandes éxitos, entre los que destacó la "Historia de
las Galeras del Pao". En las artes del contrapunteo, también resaltó en
compañía de importantes copleros, pues su facilidad de improvisación era
notoria.
Seguramente
cantaba algún pájaro sabanero en el momento del alumbramiento de María
Nicomedes, allá en el hato “Merecurito” en 1939, y de seguro fue así porque la
criatura –pocos años después- comenzó a imitar el canto, los tañíos y las
distintas voces del monte, ese tan amado y tomado de sorpresa por el niño Dámaso
Figueredo, hijo de José Antonio Robles.
En las luces
de adentro, en los rastrojos y apagados fogones de la sabana. En la marca del
oso hormiguero, o en la mirada del cunaguaro, en la niebla del miedo, donde la
cacería y el arreo imperan, Dámaso advirtió la danza de la canoa y la fiebre
nerviosa de su río Tiznados, una mancha serpentina –casi detenida- que el llano
atajó en Guardatinajas."
NI EN COMPADRAZGO NI EN
PRIMO
Después
de Dios en el Cielo
Por
ser el poder divino
Le
doy gracias a mis padres
Mis
abuelos y mi padrino
Haberme
echao en el mundo
Un
hombre reconocido
Que
no me asustan con sombras
Ni
muero de nerviosismo
Soy
un negro arrequintao
Con
bastante raza de indio
Me
recuerdo que mi padre
Fue
cacique de una tribu
Mi
madre tambien tenía
Descendencia
de guajiro
Por
eso yo en todas partes
Soy
como guaitacamino
En
la noche mas oscura
es
que soy mas agresivo
El
tigre lo oigo roncando
A
donde sea me le arrimo
Si
hay un cementerio viejo
Solamente
me persino
Pa´que
no me sarga el
muerto
Ni
me asombre el mal espíritu
Yo
me le arponeo a un caño
Cuando
veo un cocodrilo
Abrazarlo
po el pescuezo
Igual
que un par de enemigos
Con
los mismos dientes míos
Le
reviento los colmillos
Y
entonces saco el puñar
Pa´darle
por el codillo
También
con un dueño de Hato
Discutí
por un cochino
A
cuenta de millonario
Se
la quizo dar de vivo
Cuando
me dijo chismoso
Se
me prendieron los hígados
Y
la lengua se le torció
Como
tripa e´ puerco espino
No
tengo real en el banco
Y
sé que vivo tranquilo
No
le ando envidiando a nadie
Lo
que tenga en su bolsillo
Yo
me siento muy feliz
Con
lo poco que consigo
Ninguno
se da de cuenta
Los
árboles que cautivo
A
mí el que me da le doy
De
acuerdo a lo que recibo
Yo
no creo en parentesco
En
compadrazgo ni en primo
Tampoco
en esas visitas
Diariamente
de un vecino
En
esa farsa confianza
Es
donde está el enemigo
En
mi casa todo el mundo
Tiene
que andar por el hilo
Cuando
mi mujer da a luz
Voy
a repararle el niño
Por
ley tiene que ser negro
No
pálido ni amarillo
Si
no nace pata e´plancha
La
sangre se la examino
Yo
cuando embarro mi casa
Dejo
dos o tres portillos
Para
cuando esté por juera
Llegar
metiendo el oido
Hallar
por donde asomarme
En
caso que sienta un ruido
Con
el pié izquierdo alante
Y
la otra en el cuchillo
uno de mis favoritos en la musica llanera
ResponderEliminarUn gran jerarca del Folclor, Don Dámaso Figueredo.
ResponderEliminarMuy Buena Pagina, Gracias!!!
ResponderEliminar