JOSE PEREZ, HOMENAJE A UN COPLERO

Nostalgia profunda siente el pueblo llanero con la partida de un excelente artista, quien con su canto y silbido alegró grandes escenarios de Colombia y Venezuela.

La tarde del primer día de junio se llenó de tristeza enlutando las llanuras que inspiraron sus letras, el descenso del cantautor Julio Pantoja.
El estilo musical de éste guariqueño era único en el horizonte llanero, donde sus melodías van preñadas de puro olor a sabana, a mastranto, corral, soga y paradero. Con el Canto de Pantoja se identificó el becerrero del hato, el criollito que le madruga a la dura jornada del ordeño, el caporal y cabrestero cuando hay trabajo de llano en los hatos. La canción “Llanero que canta y silba” se quedó en el colectivo de gran parte de los llaneros, que se identifican con ella y Pantoja efectivamente hace una narrativa de las vivencias y el transcurrir típico de nuestros campesinos.