23 de noviembre de 2016

CRISTINA MAICA, REFLEXIONEMOS

Natural de San Fernando de Apure, estado Apure. A la edad de 5 años se inicia en un programa radial de corte infantil llamado “Los pitoquitos”, transmitido por la emisora “La voz de Apure”. En 1978 realiza su primera producción discográfica titulada “Expresión llanera” y sigue cosechando éxito tras éxito. En 1985, con el tema “Soy la copla” del compositor apureño Arístides Díaz obtiene el primer lugar en el renglón de voz recia, en uno de los festivales más importantes celebrados en la música llanera, como lo era “El Florentino de Oro”. A partir de ese momento, el nombre de Cristina Maica comienza a sentirse en los distintos escenarios de la música llanera. Al año siguiente graba “La vecina”, del compositor venezolano Hugo Blanco, y se consolida con este tema como la voz femenina del folklore. Ya en el tope de la popularidad continúa su racha de éxitos y aparecen temas como: De guayabo en guayabo”, “El ladrón”, “Dónde están los gallos”, “El rey”, “Hecha en Venezuela”, “Amante”, “No hay perdón”, “Golpe y golpe”, “De moda que sí”, “La guachimana” y “Yo si monto cacho”, entre otros. Esta hija del llano ha cautivado también al público colombiano, país se le reconoce como la “Embajadora artística de la integración colombo-venezolana y en 1990 es proclamada la número 1 de la canta llanera en Arauca y el Departamento del Meta, Colombia

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